El “aislamiento social preventivo y obligatorio” determinado por el gobierno nacional para prevenir la propagación del coronavirus pone a muchas de las víctimas de violencia de género en un escenario complejo y de extrema vulnerabilidad, el de estar aisladas junto a sus agresores. A lo que se suma la posibilidad de un incremento de las violencias intrafamiliares. Ese contexto los gobiernos nacional y local, profundizaron los canales de comunicación, denuncia y asesoramiento para las mujeres.
De acuerdo al último informe del Registro Único de situaciones de Violencia hacia las Mujeres (Ruvim), que elaboran el Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec) junto al área de Género de la provincia, en el segundo cuatrimestre de 2019, más de 5400 mujeres dejaron registrado a través de alguno de los canales disponibles haber sufrido situaciones de violencia, y en muchos de los casos, cada una de las víctimas lo hizo más de una vez, ya que los registros de violencia en el mismo período ascienden a más de 9 mil.
Desde la Secretaría de Género y Derechos Humanos de la Municipalidad indicaron que ante las medidas de restricción de la circulación, se priorizará la escucha telefónica activa y salvo las urgencias, no se programarán entrevistas personales; y recordaron que ante situaciones de violencia que impliquen un riesgo de vida para la mujer, existen dos centros de protección para resguardar la integridad física y psíquica de las víctimas y sus hijos.
“Aunque la violencia de género ocurra en el hogar, no se trata de un asunto privado; por eso, en este marco de excepcionalidad, el personal profesional de la Dirección de Prevención y Atención de las Violencias de Género está abocado a la prestación de servicios que consideramos esenciales para las mujeres de nuestra ciudad”, señaló la secretaria, Mariana Caminotti, y consideró que “ante el distanciamiento social y la restricción a la circulación de personas nos exigen estar en nuestras casas, es esperable que esto tenga un impacto distinto para varones y mujeres”.
“La convivencia de tiempo completo puede recrudecer las situaciones de violencia de género y aquí hay dos cosas que son fundamentales: disponer información acerca de los canales oficiales disponibles para consultar y denunciar, y apelar a los vínculos y redes de confianza y afecto, e intentar mantenerse en contacto en caso de necesitar ayuda”, señaló al funcionaria.